¿Por qué es importante ganar peso?
Se estima que cuando el Índice de Masa Corporal-IMC de una persona, se encuentra por debajo del rango entre 18,5 y 24,5% se está dando un caso de falta de peso corporal, una situación que de la misma forma que puede estar ocasionada por un déficit nutricional, también puede deberse a la acción de ciertos medicamentos, mal funcionamiento de la tiroides, molestias digestivas o incluso, situaciones profundas de estrés o ansiedad.
Puesto que el equilibrio es salud, una delgadez muy marcada tiene la facultad de alterar las funciones del organismo, ocasionando por ejemplo: debilidad y caída del cabello, piel seca y frágil, ausencia de la regla y problemas de fertilidad al igual que debilidad en el sistema inmune.
Más allá de lo estético, ocuparse de subir de peso cuando así se requiere, es un esfuerzo que suma al bienestar y que por supuesto, crea las condiciones para aprender a disfrutar de un estilo de vida saludable.
El papel del metabolismo a la hora de ganar peso
Contrario a lo que muchas personas suponen, ganar peso no es más sencillo que perderlo y esto se debe a que se trata de un proceso que va más allá de incrementar la ingesta de calorías, pues así como ocurre con un plan de adelgazamiento, en este también influyen diversos factores individuales para que tenga éxito, por ejemplo, el metabolismo.
En efecto, cuando se habla de metabolismo, se está haciendo referencia a la forma en la que se presentan las reacciones de las células del cuerpo, tras la conversión de los componentes de los alimentos en energía; por lo tanto, se distinguen dos tipos de metabolismo, el lento y el acelerado.
Ganar peso con el metabolismo acelerado implica ocuparse de rebasar las necesidades calóricas diarias, de tal manera, que se empiecen a almacenar reservas preferiblemente de masa muscular. Se requiere una adecuada elección de alimentos para un aumento saludable de peso siendo las proteínas, las grasas saludables, las frutas y verduras y los granos enteros las mejores fuentes nutricionales.
Para quienes tienen el metabolismo el lento, el tema apunta a una digestión más lenta y a un menor gasto calórico. El tipo de alimentación se vuelve sumamente importante, lo mismo que preferir los ejercicios con pesas antes que una actividad física muy aeróbica.
La mejor dieta para subir de peso
Si bien lo más responsable es asesorarse con un profesional en nutrición para establecer un plan nutricional para ganar peso que realmente se adapte a las condiciones particulares de cada quien, de manera general, existen algunas pautas que pueden ayudar a la consecución de este propósito.
- Horarios y organización: una rutina de alimentación bien estructurada y estable, tiene mayores posibilidades de arrojar los beneficios esperados. Se aconseja establecer 3 comidas grandes a lo largo del día y 2 algo más pequeñas a manera de meriendas; de ser posible, planear los diferentes platos y hacer la lista de la compra para tener todo a disposición.
- Cantidad de proteína diaria: los estudiosos del tema, recomiendan que por cada kilo de peso, se consuma 1 gramo de proteína. Sin embargo, se sabe también que las porciones más grandes involucran mayores ventajas.
- Aumentar el tamaño de las porciones: progresivamente, se pueden ir incrementando las porciones que se consumen. Dando prioridad a los alimentos que aportan energía.
- Platos más nutritivos: incorporar adiciones de salsas naturales a las proteínas, frutos secos y semillas a las ensaladas, adicionar algo de queso rallado o quizás acompañar con algunos purés, son alternativas que enriquecen el acto de comer.
- Snacks y multivitamínicos: los batidos de proteína de Herbalife, así como las barritas de proteína y multivitamínicos, son opciones para consumir entre comidas y asegurar buenos aportes en cuanto a nutrientes.
Algunos obstáculos para ganar peso
Así como buena parte de las personas logran sostener un peso constante a través de los años, para algunos no es tan sencillo y por más que lo intentan, enfrentan fluctuaciones o simplemente, no alcanzan el ideal de ganar ese peso requerido para su bienestar.
Cuando no se logra subir de peso, a pesar de intentar diversas estrategias, es propio ponerse en manos de un profesional para revisar los siguientes factores:
- La genética: el material genético tiene un papel principal en la regulación del peso corporal debido a que se cataloga como un factor predisponente. Por supuesto, esta carga hereditaria se acompaña de componentes ambientales que también pueden dificultar un poco las cosas.
- El metabolismo basal: algunos cuerpos tienen la capacidad de quemar una importante cantidad de calorías estando en reposo, de ahí que sea algo complejo poder ganar kilos a pesar de que exista una buena alimentación.
- Niveles altos de estrés: aunque se trata de algo emocional, el estrés puede ser un detonante para que el organismo empiece a procesar los alimentos de manera diferente.
- Problemas con el sistema digestivo: cuando este sistema deja de trabajar de manera idónea, es posible que aunque se coma bien, el cuerpo no logre absorber adecuadamente los nutrientes.
La importancia de ganar masa muscular
Subir de peso no es una labor que consista simplemente en comer en cantidades más grandes, esta misión involucra una serie de consideraciones. Por ejemplo, empezar a dar importancia a la ganancia de masa muscular ya que los músculos se encargan de funciones claves tal y como asegurar la movilidad que demandan las acciones de la vida diaria, la protección de los órganos, la estimulación del metabolismo y el incremento de la resistencia.
Es vital que el aumento de peso que se consiga, se logre no por el incremento de los depósitos de grasa, sino por la mejora de la masa de los músculos y esto se alcanza a través de una buena nutrición y de hacer ejercicio con frecuencia.
¿Cómo se aumenta la masa muscular?
La decisión de mejorar el estado físico y más exactamente, de procurar un mayor índice de masa muscular, demanda cambios en la vida diaria que deben transformarse en hábitos para que los resultados sean a largo plazo.
La ingesta de alimentos con alto contenido proteico como el pescado, huevos, carnes rojas, productos lácteos y lentejas es de gran ayuda puesto que representan ventajas para las fibras de los músculos.
Los carbohidratos también juegan un papel importante en esta nutrición especializada para ganar músculo, los cereales integrales, la pasta, las patatas y en cuanto a frutas, el plátano, son grandes aliados.
Las rutinas de entrenamiento deben realizarse de 3 a 5 veces por semana acudiendo a los ejercicios de carga y algunos cardiovasculares. Los últimos son favorecedores de la capacidad respiratoria y mantienen a punto el corazón.
Hacer lo necesario para tener una buena calidad de sueño es un factor importante, pues en este tiempo de descanso se logran sintetizar mucho mejor las proteínas que se consumen.
Los suplementos nutricionales
La suplementación para ganar musculatura es una alternativa que ya no solamente tiene que ver con los deportistas de alto rendimiento, pues la verdad es que cada vez más personas del común se interesan en estrategias para potenciar sus avances.
Se trata por lo tanto de ayudas para lograr el cumplimiento de los requerimientos nutricionales diarios, que de acuerdo a su composición, también pueden asegurar un aporte extra de fuerza y una mejor recuperación muscular para la siguiente jornada de ejercicio.
Entre los productos para ganar peso de Herbalife aparecen las proteínas en polvo con o sin azúcar, el batido Fórmula 1 con sus deliciosos y variados sabores, los multivitamínicos y aquellos más evolucionados que hacen parte de la línea de nutrición deportiva Herbalife. Pueden encontrarse de manera individual o en packs básicos y avanzados.
Si lo que estás es intentando en ganar peso saludablemente o aumentar tu masa muscular, estás en las mejores manos, tus asesores nutricionistas de Herbalife. Hay personas que intentan aumentar de peso/masa muscular y por mucho que coman no consiguen ganar peso, te ayudaremos a conseguirlo.
Las proteínas nos ayudan a generar masa muscular magra y favorecen la recuperación muscular contribuyendo a mejorar la salud de los huesos.